Royal Mile

La Royal Mile es la calle principal de la Old Town, que desde el castillo en la cima de la colina lleva directo a Holyrood House: a esta magnífica calle en bajada se asoman las principales atracciones del centro histórico, edificios de época maravillosos, comercios de productos típicos y antiguos pub, cálidos y acogedores.

La larguísima milla se divide en cuatro zonas diferentes, Castlehill, Lawnmarket, High Street y Canongate, cada una con un rasgo distintivo preciso.

Desde estas calles se abre hacia el exterior una serie encrucijada de closes, es decir pasadizos cubiertos y estrechos que conducen a patios interiores, o los pends, callejones escarpados que descienden la colina casi en vertical. Estas callejuelas atribuyen a la ciudad una atmósfera particularmente sugerente, el carácter medieval y gótico inconfundible de Edimburgo, gracias sobre todo a las piedras grises de los edificios.

Castlehill

Este tramo de la Royal Mille es la parte inicial entorno al castillo. Aquí podréis admirar edificios antiguos estupendos o ir de compras en las numerosas tiendas de souvenir y de productos realizados en tartán.

Qué ver

• El Tartán Weaving Mill: este centro comercial dedicato al tartán y a los producto típicos escoceses, desde los trajes hasta las joyas pasando por todo tipo de souvenir es decididamente turístico pero puede ser un modo para ver todo lo comprable en el interior de una sóla tienda.
• Ramsay Garden: considerado el conglomerado de edificios más pintoresco del mundo gracias a las formas excéntricas de sus edificios. La mejor vista se encuentra bajo la fortaleza del castillo.
• The Scotch Whisky Experience es un centro dedicado a la producción de whisky, aconsejado sólo a quien no tiene la posibilidad de visitar una verdadera destilería de las muchas presentes en Escocia.
  www.scotchwhiskyexperience.co.uk
• Para las aburridas tardes de diluvio en la ciudad o si viajáis con niños podéis visitar la Outlook Tower que desde el 1853 acoge una sala oscura capaz de mostraros imágenes panorámicas “en vivo” de la ciudad.
  www.camera-obscura.co.uk
• Una de las rarezas de la ciudad es el edificio The Hub, una imponente iglesia de piedra trasformada en un centro de exposiciones, café, teatro, cuyo magnífico chapitel (o aguja) es el más alto de Edimburgo.
  www.thehub-edinburgh.com

Lawnmarket

Más o menos a la altura del The Hub la Royal Mile se abre y se ensancha convirtiéndose en Lawnmarket, en tiempos lugar de un mercado.

Qué ver

• Si queréis ver una típica casa del ‘600 podéis visitar la Gladstone’s Land, restaurada y equipada con muebles y objetos de época originales.
  www.nts.org.uk/Property/Gladstones-Land
• Los amantes de la literatura por su parte podrán visitar el Writers’ Museum alojado en otra casa del ‘600 y dedicado plenamente a los tres grandes escritores escoceses Robert Burns, Walter Scott y Robert Louis Stevenson.
  www.edinburghmuseums.org.uk/Venues/The-Writers-Museum
• Para entender el lado oscuro y gótico de la ciudad debéis aventuraros en la multitud de closes que se abren a la Royal Mile como el Brodie’s Close que toma su nombre de uno de los muchos personajes conocidos de la ciudad, el diácono William Brodie, de día icono de rectitud y moralidad y de noche, ladrón de cajas fuertes.

High Street

Pasado George IV Bridge comienza el tercer tramo de la Royal Mile, igualmente fascinante y misterioso, la High Street.

Qué ver

• No puede faltar una visita a la High Kirk of St Giles, la catedral de Edimburgo tan rica de atractivo y atmósfera.
• La catedral está situada en el centro de la Parliament Square, una pequeña plaza que asoma al Royal Mile: aquí encontraréis el impresionante Parliament House, el viejo parlamento escocés, la estatua equestre del rey Carlos II, el Market Cross, donde un tiempo proclamaban las ordenanzas ciudadanas y finalmente el Heart of Midlothian, donde surgió la cárcel civil y sobre la que aún hoy los pasantes escupen como manifestación de superstición.
• Bajo las antiguas City Chambers se encuentra una de las atracciones más especiales e inquietante de Edimburgo, el Mary King’s Close, el nivel inferior de la ciudad, con callejuelas y callejones que forman una especie de ciudad perdida por debajo del Royal Mile, se puede visitar con tours guiados.
  www.realmarykingsclose.com
• Los nostálgicos pueden visitar el excéntrico Museum of Chilhood que recoge muñecas, osos de peluche, trenes de juguete y marionetas de época.
  www.edinburghmuseums.org.uk/Venues/Museum-of-Childhood
• Finalmente el Scottish Storytelling Centre situado en una estructura del ‘400 en madera y piedra que acoge la historia de la narrativa escocesa desde sus orígenes a Harry Potter.
  www.scottishstorytellingcentre.co.uk

Canongate

Durante casi 700 años Canongate ha sido un barrio de mala fama de la ciudad, la parte más plebeya y oscura que ha inspirado multitud de novelas y escenas.

Después de un minucioso trabajo de rehabilitación urbanística el barrio recobró vida e impulso y a día de hoy conserva su carácter decididamente auténtico gracias a sus edificios antiguos y originales reservados a residencias privadas y al hecho de no haber sido fagocitado por el comercio turístico y las tiendas de souvenir, conservado su gótico peculiar y fascinante. De hecho son pocos los turistas que dedican atención a esta parte única del Royal Mile.

Qué ver

• Uno de los edificios más característicos de este tramo de calle es el magnífico Canongate Tolbooth, una antiguo edifico que se remonta al 1591: hoy acoge un antiguo pub extremadamente auténtico al que acude la gente del barrio y el The People’s Story, un museo gratuito dedicado a la vida cotidiana de la ciudad durante los siglos que, con franqueza, desilusiona un poco.
• Decididamente más atractivo es el Canongate Kirk y el pequeño y espectral cementerio situado a su espalda.
• Extremadamente sugerentes también los numerosos closes como el Dunbar’s Close, con un bonito jardín del ‘600 y el Whitehorse Close, que en tiempos acogía la pensión desde la que partían las diligencias hacia Londres y que resume todas las características distintivas de la arquitectura escocesa: frontones escalonados, lucernarios, planos prominentes y escaleras exteriores.